Casa de Retiros de Nuestra Señora del Carmen
(Casa Carmo)
La misión de la Casa de Retiros de Nuestra Señora del Carmen (Casa Carmo), a semejanza y en complementariedad con la Casa de Retiros de Nuestra Señora de los Dolores (Casa Dores), es la de hospedar a los peregrinos que, queriendo pernoctar en Fátima, desean hacerlo beneficiándose de un ambiente sereno y espiritualmente profundo, insertados en las propias instalaciones del Santuario. Así, estarán especialmente cerca de los lugares que atraen de forma particular el corazón de los peregrinos de Fátima: la Capilla de las Apariciones y la Imagen de Nuestra Señora que allí es venerada; la Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, que guarda en su interior las tumbas de los Pastorcitos; la grandiosa y contemporánea Basílica de la Santísima Trinidad; y el Recinto de Oración, en el cual se reúnen las grandes asambleas de peregrinos para celebrar la fe. Además de acoger a los peregrinos de forma individual o en familia, se destina a la celebración de retiros, encuentros de formación y otras actividades formativo-pastorales, así como al alojamiento de los participantes. En el edificio contiguo a éste, frente al Recinto, se ubican casi en su totalidad los distintos servicios del Santuario. Este edificio fue inaugurado el 13 de mayo de 1986 por D. António Ribeiro, Cardenal Patriarca de Lisboa. En su atrio de entrada se encuentra una escultura de Nuestra Señora de Fátima, de 1931, cuyo autor es António Teixeira Lopes. En los orígenes de la Casa de Retiros de Nuestra Señora del Carmen (Casa Carmo) estaba el Hospital con el mismo nombre, inaugurado en 1947. |